6 oct 2022

El monte me hace feliz

   Hace ya unos diez años que empecé a correr y que lo que siempre había sido una "tortura" se convirtió en una parte importante de mi vida.

He explicado en infinidad de ocasiones cómo me enganché a esto de las zancadas, de correr, del running, pero no ha sido hasta hace muy poco que me he dado cuenta de cómo los motivos que me engancharon no fueron los mejores y que eso explica que tuviera un parón de cerca de 5 años.

Como explicaba en este post, al empezar a correr me volví esclavo del reloj y la motivación no venía de la acción de correr si no, como dice una amiga, de cosas del ego. No se trataba de disfrutar de correr. No se trataba de superación. Se trataba de demostrar algo a mí mismo y a los demás. De encontrar mi validación en forma de horas, minutos y segundos.